En un ambiente de escucha fraterna y de comunión eclesial, la Conferencia Eclesial de la Amazonía (CEAMA) sostuvo un encuentro con el Dicasterio para los Obispos, presidido por Monseñor Filippo Iannone, O. Carm., Prefecto, y el Arzobispo Ilson de Jesús Montanari, Secretario.
Esta reunión formó parte del itinerario de trabajo que la CEAMA realiza en Roma, buscando fortalecer los lazos con los distintos dicasterios de la Santa Sede, en el marco del proceso sinodal.
Un camino de comunión y discernimiento pastoral
Durante el diálogo, la delegación de la CEAMA presentó los avances del camino recorrido desde la creación del organismo, surgido como fruto directo del Sínodo para la Amazonía.
Se compartió el proceso vivido en estos años, marcado por la búsqueda de horizontes apostólicos sinodales que expresen la identidad propia de un cuerpo eclesial al servicio de los pueblos amazónicos, en comunión con las conferencias episcopales de los nueve países que conforman la región.
El Cardenal Barreto destacó que “la CEAMA nació en el corazón de los obispos de la Amazonía, como un signo del Espíritu para llevar adelante la conversión pastoral, ecológica y sinodal que el Papa Francisco ha pedido a toda la Iglesia”.
Asimismo, Mons. Zenildo Lima explicó que este proceso busca no imponer planes pastorales, sino animar horizontes comunes que cada Iglesia particular pueda encarnar según su realidad, fortaleciendo la comunión y el discernimiento compartido.
Una Iglesia que aprende caminando con su pueblo
Durante la conversación, los representantes de la CEAMA relataron el reciente Encuentro de Obispos de la Amazonía, realizado en agosto en Bogotá, donde participaron más de 90 obispos de las siete conferencias episcopales de los países de la Amazonía.
Este encuentro reafirmó la vitalidad del proceso eclesial amazónico, que se nutre de la escucha a la vida consagrada, los sacerdotes, los laicos, los jóvenes y los pueblos indígenas, en un espíritu de comunión y esperanza.
Mauricio López señaló que “la CEAMA no pretende enseñar, sino aprender caminando junto al Pueblo de Dios; su fuerza está en el diálogo, en la escucha mutua y en la posibilidad de tejer juntos una Iglesia que nace de la vida y del territorio”.
Mirar la Iglesia desde la Amazonía
El diálogo con el Dicasterio para los Obispos también permitió reflexionar sobre cómo la experiencia amazónica está ayudando a repensar la misión episcopal en clave de sinodalidad.
Se destacó que muchos obispos de la región han sido nombrados después del Sínodo de la Amazonía y encuentran en la CEAMA un espacio de formación, acompañamiento y fraternidad pastoral.
El Cardenal Iannone valoró este proceso como una contribución significativa a la renovación del ministerio episcopal, que busca vivir la colegialidad desde la realidad concreta de los pueblos y territorios amazónicos.
Un signo de comunión desde el territorio
Al finalizar el encuentro, la CEAMA ofreció al Dicasterio un presente simbólico como expresión de gratitud y comunión: una bandeja tallada en palo de sangre, elaborada por artesanos de la comunidad Inga del Valle de Sibundoy (Putumayo, Amazonía colombiana).
El obsequio representa la vida que brota de los territorios amazónicos, el tejido de culturas y espiritualidades que florece en la diversidad, y la comunión que la Iglesia busca fortalecer desde el corazón de la Amazonía hacia toda la Iglesia universal.