En un ambiente de diálogo fraterno y de profunda comunión eclesial, una delegación de la Conferencia Eclesial de la Amazonía (CEAMA) visitó el Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral en Roma, los días 23 y 27 de octubre de 2025, con el propósito de fortalecer los lazos de cooperación y trazar caminos conjuntos para la promoción del desarrollo humano integral en el territorio amazónico.
Durante los encuentros, se compartieron los avances del proceso eclesial que dio origen a la CEAMA, su estructura y sus líneas de acción, así como las oportunidades de colaboración con el Dicasterio en ámbitos como la formación, la comunicación y la articulación pastoral con las Iglesias locales.
El Cardenal Pedro Barreto, presidente de la CEAMA, narró el camino histórico que condujo a su creación: desde la fundación de la Red Eclesial Panamazónica (REPAM) en 2013, pasando por el Sínodo de la Amazonía en 2019, hasta la constitución de la CEAMA el 29 de junio de 2020, en plena pandemia del COVID-19. Subrayó que esta instancia “nace como fruto maduro del Sínodo, al servicio de la vida, de la evangelización y del cuidado de la Casa Común en la Amazonía”.
Por su parte, Mons. Zenildo Lima, vicepresidente de la CEAMA, destacó la importancia del reciente Encuentro de Obispos de la Amazonía, donde se reafirmó la necesidad de una articulación entre las Iglesias locales amazónicas. “No queremos multiplicar estructuras, sino fortalecer la incidencia y acompañar a las Iglesias del territorio en sus desafíos pastorales y sociales”, afirmó.
El vicepresidente de la CEAMA, Mauricio López, resaltó la estrecha colaboración entre la REPAM, la CEAMA, la REIBA y la PUAM, como expresiones complementarias de un mismo cuerpo eclesial al servicio de la Amazonía. “No hay dilema entre estructuras: todas son parte de la misma misión eclesial de escucha, servicio y transformación del territorio”, expresó.
La lideresa indígena Patricia Gualinga recordó que para los pueblos originarios “las estructuras eclesiales tienen sentido cuando responden a los clamores del territorio”, y agradeció la cercanía del Papa Francisco, cuya escucha activa “ha impulsado a los obispos y comunidades a vivir una nueva forma de ser Iglesia con rostro amazónico”.
Desde la Vida Religiosa, la Hna. Laura Vicuña Pereira subrayó que “la CEAMA es presencia que da voz a quienes no tienen voz”. Invitó a seguir socializando las buenas prácticas que generan esperanza en los territorios y a mantener viva la actitud de escucha. “El territorio nos pide reflexión, comunicación y movimiento.
El Cardenal Michael Czerny, prefecto del Dicasterio, acogió con entusiasmo las propuestas, subrayando que el desarrollo humano integral implica “remover aquello que impide crecer y florecer”. Propuso consolidar la cooperación entre ambas instituciones, tanto en los planos formativos como en la búsqueda de sostenibilidad económica.
Durante las jornadas de trabajo, se abordaron aspectos financieros y de planificación institucional de la CEAMA, incluyendo su Plan Estratégico y la creación de un fondo patrimonial sostenible que garantice la continuidad de sus proyectos. El Dicasterio ofreció su acompañamiento técnico y pastoral para fortalecer el fundraising y la presentación de proyectos auditables y bien documentados, asegurando transparencia y viabilidad a largo plazo.
La reunión concluyó con el compromiso conjunto de continuar trabajando por una Iglesia con rostro amazónico, misionera y solidaria, que promueva el desarrollo humano integral desde la escucha activa de los pueblos y la comunión con las Iglesias locales.
“La CEAMA y el Dicasterio caminan juntos, animados por el Espíritu, para que la Amazonía siga siendo fuente de vida, esperanza y conversión para toda la Iglesia”.