Con un profundo espíritu de comunión y discernimiento, la Diócesis de Alto Solimões celebró del 5 al 9 de noviembre la IV Asamblea Diocesana del Pueblo de Dios, en el Centro Diocesano de Formación Frei Ciro, reuniendo a representantes de parroquias, movimientos, comunidades eclesiales y agentes pastorales de toda la región.
El encuentro fue un tiempo de escucha, oración y diálogo comunitario, orientado a evaluar el camino recorrido en los últimos años y a proyectar los pasos futuros de la misión evangelizadora en esta Iglesia amazónica.
Cuatro caminos para el futuro pastoral
Después de varios días de trabajo colectivo, la Asamblea discernió cuatro grandes rutas pastorales que marcarán la acción diocesana en los próximos años:
- Consolidación de la Iniciación Cristiana (CVI) en todas las parroquias, fortaleciendo la formación y maduración de la fe desde la primera proclamación hasta la vida comunitaria.
- Fortalecimiento de las Comunidades Eclesiales de Base (CEB) y del ministerio laical, promoviendo la corresponsabilidad y el protagonismo de los laicos y laicas en la vida de la Iglesia.
- Cuidado de las vulnerabilidades humanas y de la Casa Común, reafirmando el compromiso con la vida, la justicia social y la ecología integral, en sintonía con el magisterio del Papa Francisco.
- Acompañamiento a la juventud, creando espacios de formación, encuentro y participación activa de los jóvenes en la vida eclesial y social.
Una Iglesia viva y en camino
El obispo diocesano, Monseñor Adolfo Zon Pereira, destacó durante la clausura que “la Asamblea es signo de una Iglesia viva, participativa y misionera, que busca caminar junta, escuchando al Espíritu Santo y sirviendo con alegría al pueblo de Dios en Alto Solimões”.
La celebración concluyó con la Eucaristía del domingo 9 de noviembre, en la que también se dio cierre al Año Jubilar Diocesano por el 115º aniversario de la creación de la Diócesis de Alto Solimões.
Este proceso sinodal continuará ahora en cada parroquia, donde se realizarán asambleas locales para definir acciones concretas que encarnen los caminos pastorales propuestos.La CEAMA celebra este testimonio de comunión y compromiso pastoral, que refleja el espíritu del Sínodo para la Amazonía y fortalece una Iglesia que camina con su pueblo, custodia la vida y anuncia con esperanza el Evangelio en el corazón de la Amazonía.






